Conociendo nuestro patrimonio Edificio Calle Justo Sancho Miñano 2

Situado en el barrio Héroes de España en la confluencia de las calles Justo Sancho Miñano y General Marina, se halla este edificio conocido popularmente por el nombre de la heladería que hay en los bajos: California.

Salvador Gallego, profundo conocedor de la obra de Enrique Nieto nos cuenta su historia:

“Será el carnicero e industrial D. Pedro Fernández Batanero quién encargue, al ingeniero militar D. Eusebio Redondo Ballester, la redacción del trazado de una casa sobre el solar —148— que le había sido adjudicado en el nuevo Barrio del Ensanche —Reina Victoria—.

El proyecto —hoja única—, firmado el 14 de marzo de 1907, nos presenta una casa de dos plantas —a dos vientos y con esquina achaflanada—, sobre una superficie de 206 m2, con una distribución funcional y alzado semejante, en composición y disposición de estructuras, al resto de las construcciones civiles que, por esos años,

realizarán los técnicos castrenses afincados en la urbe. A mediados de 1916, los comerciantes de la calle Granada —hoy, Justo Sancho Miñano—, utilizan el periódico local El Telegrama del Rif, para que se ponga en conocimiento del Presidente de la Junta de Ar/ bitrios General Monteverde, su deseo de que/ la parada de carruajes existente en la ci-/ tada via desaparezca, por ser un verdadero/

atentado á la higiene y á las buenas costum-/ bres (sic).

A principios de la década de los cuarenta, consta la propiedad a nombre de D. Marcelino Fernández Muñoz (1941). El futuro propietario y morador, D. Ruperto Prado —Abogado, Procurador y Corredor de Comercio (a principios de 1933)—, es vocal civil electivo de la Junta Municipal (1927), cuarto teniente de alcalde de la Comisión Gestora Municipal —15 junio 1938— y diputado tercero de la Junta de Gobierno del Ilustre Colegio de Abogados de Melilla (1949).

El Sr. Prado Cirre solicitará, a mediados de 1943, los servicios del Sr. Nieto para la renovación de su predio.

El proyecto de reformas en la calle Granada 2, rubricado por el barcelonés el 2 de agosto de 1943 —memoria descriptiva— y con un presupuesto de 120.000 ptas., será presentado en el municipio tres días más tarde para su examinado —10 de agosto—, y aprobado, definitivamente, por la Corporación, a mediados del mes siguiente.

Las obras que serán llevadas a cabo por el contratista D. Andrés Alcaraz Márquez —en el precio alzado de 150.426,25 ptas.—, consistirán en sustituir la viguería de madera —hierro—, correr la caja de escalera hacia dentro —mayor anchura para la primera crujía—, establecer un nuevo patio —luz directa en todas las estancias—, y colocar miradores en las dos fachadas —mayor amplitud en las habitaciones—.

La planta baja se dividirá en dos locales comerciales, partiendo del acceso central —por la calle Granada— donde se ubicarán el vestíbulo, la escalera y el patio. El piso primero, destinado a una sola vivienda, repartirá —con vistas directas a la calle— dormitorios, comedor, sala, gabinete y despacho, dejando dependientes de los patios —luz y ventilación—, baño, cocina, servicios, despensa y la antecámara

y tocador de uno de los dormitorios.

Por último, su planta de azotea distribuirá el dormitorio de servicio, el cuarto lavadero y el aseo, retranqueados de la línea de fachada.

El alzado, en proyecto, se verá alterado al aplicar las siguientes modificaciones: ampliar el espacio para la rejería en los balcones, unificar el pretil escalonado de la azotea y la terminación de sus cierres, aumentar el tamaño de los placados de escayola en las sobre ventanas, independizar el dintel corrido de sus vanos y, finalmente, dotar de ladrillo de cemento al zócalo de fachada.

Estas variaciones, de común acuerdo con el arquitecto, restarán, en cierta medida, la racionalización y el límite que había impuesto al exorno en los paramentos, si bien, la fachada quedará mucho más enriquecida y acorde con un entorno, por qué no decirlo, que parece imponérselo.

Los placados se componen de líneas compuestas —rectas y curvas— en una especie de arriate con flores abiertas en todo su esplendor: radiales en el trazado de sus pétalos —independizados de una fronda de hojas lanceololadas—, que conforman estrellas en su firmamento o soles pentagonales.

Asimismo, las series tubulares, en el frontal de las mirandas, parecen querer sonorizar la fachada. Junto a ellos, el recorrido de los herrajes y los pináculos de las crujías —merlones de castilletes—, nos hablan de unos modelos anteriores, rabiosamente recurrentes, que mediatizan las consideraciones hacia una evolución racionalista anunciada que, difícilmente y sólo en contadas ocasiones, dejará de ser figurativa.

En el primer piso, en el trasvase de siglos vivió el que fuera Secretario del Excmo. Ayuntamiento de Melilla, D. Alfredo Meca Pujazón y, en el resto del principal, tiene su sede, actualmente, la Consejería de Economía, Empleo y Turismo de la Ciudad Autónoma de Melilla (Agencia de Desarrollo Local, Proyecto Melilla S. A.

y Planes de Empleo).”

[Bibliografía: Salvador Gallego Aranda. Enrique Nieto. Un paseo por su arquitectura. Fundación Melilla Ciudad Monumental.2010 ]
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